
La transformación del CIO
Las conversaciones sobre cómo ha ido evolucionando y cuáles son los actuales roles del CIO han de entenderse conocimiento una premisa histórica errónea. Muchos escritores y analistas contemporáneos no entienden lo que significó en su día ser un CIO, ni para qué roles fueron creados, por primera vez, a principios de los 80.
Antes de esto, el manejo y administración de las IT en las empresas grandes se reducía a un entramado de proyectos dirigidos principalmente a automatizar los procesos del back-room.
El término «chief information officer» fue acuñado en 1981 por William Synnott, vicepresidente de procesos de datos del Banco de Boston, quien se dio cuenta que el IT era estratégico, y no solo para reducir costes, por lo que debería ser examinado y desarrollado desde la perspectiva de la empresa. Antes de esto, no había ejecutivos responsables de introducir el IT como una de las iniciativas estratégicas de las empresas. El rol del CIO fue creado, precisamente, para llenar este vacío.
Es decir, que las responsabilidades de los CIOs están en continua evolución. En este artículo de ComputerWorld se describen los nuevos roles de estos ejecutivos:
1 – Arquitecto «de conversación»
Los CIOs siempre han participado en conversaciones estratégicas de la empresa, la novedad es que ahora crean esta conversación. En un mundo donde es inevitable la tendencia hacia la digitalización, y donde el negocio de la empresa depende de cómo se adapta a los dispositivos conectados a la red, alguien tiene que crear un marco donde se compartan información y decisiones. Alguien tiene que establecer algunas barreras de protección para asegurar que se produce un discurso constructivo. Y ese «alguien» debería ser el CIO valiéndose de estos tres elementos básicos: las prioridades, el reparto de recursos y la teoría de la victoria (lo vamos a lograr por las siguientes razones).
2 – Anotador digital
Históricamente, la relación tangencial entre CIO y clientes ha sido la mejor en la empresa. Para lograr un negocio digital, el CIO tiene que trabajar codo a codo con marketing para poner sensores estratégicos que recojan el punto de vista del cliente. El éxito siempre ha dependido de lo que necesitan estos en comparación con lo que la empresa tiene que vender. Lo que ha cambiado en la era digital es que ahora se puede saber más exactamente lo que los cliente necesitan. Es lógico que el CIO juegue un importante papel de captura, filtrado y canalización de estos datos.
3 – Clasificador de «microcredenciales»
Una pieza clave de la transformación del lugar de trabajo (aunque poco comentada, de vital importancia) es cómo la gente dice lo que puede hacer. Antes esto se reflejaba con diplomas y certificaciones profesionales, ahora está siendo suplantado por las denominadas «microcredenciales». Se trata de una credencial centrada en una habilidad o capacidad específica. El conocimiento representado por esto es mucho más específico que la que tiene un título o certificación tradicional.
Actualmente, la mayoría de las organizaciones no está preparada para gestionar este tipo de microcredenciales, pero en el futuro se espera que el CIO, en colaboración con los recursos humanos, juegue un papel importante en la conceptualización e interpretación de estos sistemas.